La mayoría de empresas de todos los sectores buscan empleados con una formación en tecnología completa. Formación, innovación y tecnología son tres requisitos que muchas compañías ya tienen muy presentes para su rutina diaria.
Formar a los trabajadores para su empleo
La era de la tecnología ha traído consigo nuevos ordenadores, nuevos sistemas operativos, impresoras digitales avanzadas, software, etc. La tecnología cambia, avanza y lo hace muy rápido. Todos necesitamos actualizar periódicamente nuestros conocimientos para poder exprimirla a fondo. Un empleado con conocimientos avanzados en el manejo de un procesador de textos ejecutará el mismo trabajo en menos tiempo que otro que no los tenga, porque aprovechará al máximo todas las herramientas que el software pone a su disposición, será capaz de llevar a cabo iniciativas que otros, por desconocimiento, no se atreven a abordar.
Por este motivo, es importante que tanto estudiantes como empleados se formen para poder desarrollar mejor su trabajo. En este sentido, la responsabilidad recae en las empresas. Son las encargadas de formar a su personal para conseguir ser más competitivas dentro de su mercado.
Los futuros trabajadores han de tener en cuenta que no solo necesitan especializarse en su sector de empleo, sino también en todos los ámbitos tecnológicos que tengan relación con él.
La tecnología, clave de la sociedad actual
Los países desarrollados se han visto envueltos en un boom tecnológico que ha supuesto la necesidad de adaptación de empresas y personas. Esta adaptación no ha sido inmediata sino que se está produciendo de manera progresiva. Si las empresas quieren ser competitivas necesitan estar al día de las nuevas formas de comunicación, así como de los nuevos sistemas tecnológicos.
De igual forma, las personas han de formarse para poder trabajar en un mundo en el que todos los empleos implican manejar una serie de cambios tecnológicos que abarcan a todos los sectores.
Formación en la empresa
En la actualidad existen planes de ayuda a la Formación Continua financiados por el Fondo Social Europeo y la Fundación Tripartita. Las empresas pueden disponer de un crédito anual marcado legislativamente en función de los empleados de la empresa y de la cuantía ingresada por la empresa en concepto de cuota de formación profesional, entre otros factores. Las empresas pueden financiar las acciones formativas que realicen en las cuotas de la Seguridad social ingresadas por las mismas.
Las ventajas de los planes de formación en tecnología
Un plan formativo bien estructurado aportará los siguientes beneficios:
- Incrementarás la productividad.
- El nivel de satisfacción de los empleados aumentará, y con ello la calidad de su trabajo.
- Se extrae todo el valor de las inversiones en tecnología que se hayan realizado.
- Favorece la igualdad de oportunidades y la promoción personal y profesional.
- Permite al trabajador prepararse para la toma de decisiones y para la solución de problemas.
- Logra metas individuales.
- Eleva el nivel de satisfacción en el puesto de trabajo.
- Ayuda a la integración en la empresa.