“Empresa líder en su sector busca…” o “Gana dinero desde casa”. ¿Te suenan este tipo de propuestas? Son ofertas de empleo fantasma o falsas. Y su redacción –sin nombres de la compañía, logotipos, etc.- y ubicación –un papel en la calle- debería hacernos huir.
Cuando estamos en paro y buscando trabajo, llega un momento en el que cualquier oferta nos puede venir bien. Pero no debemos perder nuestro tiempo y recursos contestando y enviando nuestro CV a estos anuncios.
Lo más probable es que nos llevemos un chasco y cojamos un cabreo monumental. Porque en el mejor de los casos, el puesto no se ajustará a la realidad. Y en el peor, puede que ni siquiera exista.
Lo único que pretenden las ofertas de empleo fantasma es aprovecharse de las personas que buscan trabajo desesperadamente. Y engañar a las que tienen menos experiencia y formación en el mercado laboral.
Además, lo hacen para obtener un beneficio. Ya sea pagos directos, información personal que venden a terceros o información financiera.
Por ello, vamos a desgranar algunas claves para detectar este tipo de estafas y no caer en las mismas.
Sin datos
La primera pista de que estamos ante ofertas de empleo fantasma es la falta de datos. No aparece el nombre del empleador/anunciante –aunque hay firmas que realizan procesos de selección sin facilitarlo, para mantener la confidencialidad-.
En caso de que aparezca la fuente, ésta no es fiable ni conocida. Otro dato es que utilizan cuentas de email generalistas (Gmail, Hotmail…) en vez de un correo de empresa. O números de teléfono de tarificación adicional.
Tampoco está detallado el trabajo a desarrollar.
Carpeta ‘Spam’
¿Te ha llegado una oferta de trabajo a la bandeja ‘Spam’ de tu correo electrónico? Pues eso debería darte una pista sobre lo que debes hacer con ella: enviarla a la papelera. No te molestes en leerla.
Ojo si te piden datos, porque pueden incluirlos en listados para el envío de publicidad masiva. Desconfía también si tienes varios emails –uno para temas personales y otro para trabajo- y te llega al primero. Y, por supuesto, si te piden dinero.
Demasiado buena
Algunas ofertas de empleo fantasma se detectan porque las condiciones son tan buenas que parecen mentira. De hecho, lo son.
Se trata de trabajos de pocas horas o con horarios muy flexibles, fáciles de hacer, que no requieren experiencia y con un sueldo superior al normal.
En algunos casos, la empresa ‘forma’ a sus empleados en un fin de semana. Y puede pedir un pago por el curso o para adelantar la compra de productos. E, incluso, para seguir avanzando en el proceso de selección.
Trabajar desde casa…
Las ofertas de empleo fantasma más conocidas suelen ser para trabajar desde casa y/o en negocios piramidales.
En el primer caso, te proponen montar chismes –hace años eran bolígrafos- o rellenar cuestionarios. En el segundo, debes comprar una determinada cantidad de productos para revenderlos a clientes que tú mismo consigas. Aprovechándote o timando a familiares y amigos.
Especialmente peligroso es lo que se conoce como ‘mediadores de transacciones’. Estamos ante una estafa con consecuencias penales y cárcel.
¿En qué consiste? En una propuesta para recibir transferencias en tu cuenta y reingresarlas en otras, a cambio de una comisión.
… o en el extranjero
Muchas ofertas de empleo fantasma son para trabajar en el extranjero.
Y las personas que las aceptan se encuentran con empresas que no existen o con unas condiciones laborales que no se parecen a las ofertadas.
En este sentido, también hay ofertas de formación falsas en el extranjero. Y se piden pagos para hacer frente a supuestos gastos administrativos.
¿Qué hacer ante las ofertas de empleo fantasma?
Si te llega o encuentras una oferta fraudulenta de empleo, puedes utilizar el Buzón de Lucha Contra el Fraude Laboral. En él podrás informar de las irregularidades observadas de forma anónima.
También puedes contactar con la Inspección de Trabajo y Seguridad Social en este enlace. En este caso, debes proporcionar tu nombre y firma.
Asociaciones como Facua lanzan campañas para denunciar las ofertas de empleo falsas. Y muchas asociaciones profesionales, colegios, sindicatos, etc. luchan también contra el fraude en su sector.
Si eres víctima de una oferta fantasma, no dudes en acudir a la Policía.