Controlar la ansiedad en la búsqueda de empleo es fundamental. Estamos en unos de los momentos cruciales de nuestra vida, y uno de los que más estrés desencadena.
Los jóvenes que buscan su primer trabajo sufren ansiedad debido a la impaciencia o porque no han experimentado circunstancias similares.
Y las personas mayores, porque tienen cargas familiares, se terminan el subsidio y las ayudas, etc. Esta incertidumbre resulta agotadora emocionalmente.
Qué es la ansiedad
La ansiedad es un mecanismo de defensa frente a un estímulo que rompe nuestro equilibrio fisiológico y psicológico. Y si su intensidad no es excesiva, nos puede ayudar a superar determinados problemas.
En la sociedad actual, ya no nos descontrolamos cuando nos persigue un animal salvaje. Pero nuestro organismo puede reaccionar de manera exagerada por miedo a no encontrar trabajo o a perder el que tenemos.
A veces es difícil esperar algo que se desea –y se necesita- mucho. Y cada día que pasa sin lograr nuestra meta, nos frustramos un poco más.
A esto hay que sumar otro problema. La incapacidad para tolerar situaciones desfavorables que se detecta en las generaciones más jóvenes.
Al no poder controlar la ansiedad, sufrimos ataques de pánico; taquicardia, palpitaciones y opresión en el pecho; falta de aire, sudoración, temblores, mareos, problemas digestivos, tensión y rigidez muscular,… Y vivimos en un estado de alerta prolongado.
Estos síntomas pueden ser evidentes en una entrevista de trabajo, por ejemplo. Podemos mostrarnos demasiado impacientes y nerviosos, e incapaces de controlar ciertos tics.
Consejos para controlar la ansiedad
Para controlar la ansiedad y evitar que ésta nos paralice, debemos aprender a gestionar nuestras emociones y crear una serie de rutinas que nos permitan estar activos.
Por supuesto, hay que consultar con un especialista, si es necesario. Estamos ante un trastorno y unas consecuencias físicas y psíquicas que deben ser tratados adecuadamente.
Algunas de las cosas que podemos hacer son:
- Organizar y planificar la jornada, estableciendo una rutina de búsqueda de empleo. Por ejemplo, podemos desarrollar esta actividad de 8 a 14 h. El resto del tiempo lo dedicaremos a otras cosas.
- Aprovechar el tiempo para mejorar nuestra formación. Así ampliaremos nuestro currículum y estaremos más motivados.
- Mantener unos hábitos de sueño y comidas saludables. Cuando estamos desempleados, tendemos a descuidar los horarios, ver la tele hasta la madrugada,… Acostarnos y levantarnos a la misma hora nos ayudará a controlar el estrés.
- No descuidar a la pareja, familia, ni a los amigos de siempre. Pero cuando quedemos con ellos, hay que evitar hablar continuamente del paro, de nuestro antiguo jefe, etc. Una cosa es desahogarse y otra, obsesionarnos.
- Hacer ejercicio a diario –andar, correr,…- y alguna actividad que nos ayude a relajarnos, como yoga. Además de servir para controlar la ansiedad, conoceremos gente de otros ámbitos.
Picos de ansiedad
Mientras buscamos trabajo, hay dos situaciones que nos disparan los niveles de ansiedad. Una entrevista de trabajo, y toparnos con una oferta de empleo que nos gusta y saber que encajamos perfectamente en ella.
Debemos tener cuidado para que los nervios no nos traicionen, en el primer caso. O nos hagan la espera imposible, en el segundo.
Sabiéndolo de antemano, podemos lidiar con estos picos aplicando las recomendaciones que hemos visto o pidiendo ayuda a un experto.
Facilitarnos la búsqueda de empleo
En ocasiones la ansiedad se genera por la inseguridad de estar buscando trabajo en el lugar correcto. Existen decenas de lugares en los que buscar y podemos, literalmente, volvernos locos revisando los portales de empleo. Existen servicios como el de Oficina de Empleo que se recorre las páginas en las que pueda exisitir una oferta de trabajo, las ordena y clasifica para facilitarnos la tarea. Por ejemplo, si nos preguntamos como encontrar trabajo madrid, obtendremos un listado actualizado y completo de los puestos de trabajo disponibles, independientemente de dónde se haya publicado la oferta. Así que ya sabes, no te compliques la vida más de lo que ya es.